IL PRINCIPE CORAGGIOSO

CAPITOLO I

C'era una volta, tanto tempo fa, in un luogo molto lontano e bellissimo, c'era un re molto potente, re Luis III.

Il re era nobile, giusto e aveva a sua disposizione un grande esercito. Il suo castello, in cima alla collina, poteva essere visto a mille leghe di distanza, grazie al suo splendore e alla sua luminosità, in quanto era costruito con oro, platino, smeraldi e pietre preziose.

La ricchezza del re era dovuta a una spiaggia del suo regno dove il mare gettava diamanti invece di conchiglie marine. Era uno dei regni più ambiti tra tutti i regni. Per questo motivo le sue frontiere erano sempre ben protette. La sua ricchezza era incomparabile.

Ma niente poteva essere paragonato al tesoro più grande del regno, sua figlia Olivia. La principessa più bella che fosse mai esistita.

Olivia era bella, nobile, dolce e saggia, ed era sempre di buon umore. Amava passeggiare per i giardini del castello e mangiare frutti selvatici.

Un giorno, re Luis III chiamò sua figlia.

⁃ Olivia, mia figlia. Ci ho pensato a lungo. - Disse con tono paterno. - Da quando tua madre è scomparsa, non sono più lo stesso. La manco molto.
⁃ Anch'io la manco moltissimo, papà.
⁃ Sai che un giorno sarai la regina di tutto questo impero, vero?
⁃ Padre, non voglio pensarci.
⁃ Lo so, mia vita. Ma è importante cercare un buon marito per te.
⁃ Sono ancora troppo giovane, e anche tu.
⁃ Abbiamo entrambi un dovere da compiere. Inoltre, sarò sempre qui. - Disse indicando il cuore alla giovane. - E anche se tu puoi regnare su queste terre da sola, è bene che tu abbia un uomo forte, coraggioso, che ti ami più di ogni altra cosa.

La principessa sapeva che suo padre aveva ragione. Un giorno avrebbe dovuto sposarsi, non avrebbe potuto prendersi cura di tutto il regno da sola. Ma con chi?

⁃ Hai ragione, padre. Farò ciò che mi chiedi. Ma voglio chiederti un desiderio.
⁃ Dimmi, mia figlia. Sai che non posso negarti nulla.
⁃ Voglio andare un giorno al paese, ma non come principessa. Voglio sapere com'è essere una ragazza normale e comune.
⁃ Ma figlia, è molto pericoloso.
⁃ Per favore, papà. Concedimi questo desiderio. È l'unica cosa che ti chiedo prima di sposarmi.
⁃ Va bene. Ma alcuni uomini della mia guardia ti seguiranno senza farsi vedere.

Il villaggio più vicino al castello era un villaggio molto piccolo, ma molto pittoresco.
Aveva un pozzo d'acqua al centro della piazza.
Mercanti di ogni tipo offrivano seta, erbe pregiate, gioielli e ogni tipo di cibo, mentre la gente passeggiava da un luogo all'altro, cercando qualcosa che sapevano che avrebbero trovato prima o poi.
Un giovane, bello e gentile si avvicinò a un mercante.

⁃ Mi scusi. Sabe quale strada prendere per raggiungere il Regno dei Sette Laghi?
⁃ È un regno molto lontano - disse il mercante con tono amichevole. - Ti ci vorrà almeno una settimana per arrivarci. Ma puoi prendere la strada che va verso ovest.
⁃ Grazie, signore.

Mentre si girava per continuare il suo viaggio, il giovane urtò una giovane signora, facendole cadere delle frutta che portava in un cesto.

⁃ Mi scusi. Non l'ho vista.

Poiché non avrebbe potuto vederla, pensò il giovane. Era la ragazza più bella che i suoi occhi avessero mai visto. In fretta, si chinò ad aiutarla a raccogliere la frutta.

⁃ Non ti preoccupare - disse la ragazza al giovane.

E guardandolo negli occhi, notò qualcosa che attirò la sua attenzione. Uno scintillio speciale negli occhi, che non aveva mai visto prima.

⁃ Sto solo di passaggio. Diretto al Regno dei Sette Laghi.
⁃ Quel regno è molto lontano. Da dove vieni? - chiese la principessa.
⁃ Vengo dal villaggio di Modho-or, a nord di qui. E ho sentito dire che c'è molta ricchezza in quel regno. Voglio provare la fortuna.
⁃ Cosa? Non mi hai vista? E con quegli occhi così belli... Mi scuso. - La giovane arrossì e si rese conto di non doverlo dire. - Prima di andare là, potresti restare un paio di giorni nel villaggio per riposarti.
⁃ Ci avevo pensato, ma dovrebbe esserci una ragione molto valida per rimanere. - E guardando dritto negli occhi della ragazza - penso che non sarà difficile trovarla in questo villaggio pieno di cose belle.

Le guardie del re osservavano la principessa e il giovane da lontano.
Ma non solo le guardie osservavano la coppia. Una giovane misteriosa non smetteva di guardarli, soprattutto il giovane.


La princesa se sentía muy a gusto caminando en la plaza con el joven. ⁃ Habías estado en este pueblo antes? - Pregunto Olivia. ⁃ No. Es la primera vez. Es muy bonito. Pero no me has dicho tu nombre. Yo me llamo Oliver. ⁃ Yo soy… - la princesa dudo en decirle quién era - Sophia. - mintió. ⁃ Sophia, muy bonito nombre. Eres de por aqui? ⁃ Al norte de la colina esta mi cas…, mi cabaña. El joven miro un mercader que ofrecia, una nueva especie de alimento. No era liquida, Como el agua, o los jugos de frutas. Y no era comida solida. El habia oido hablar de ese alimento, pero nunca la habia probado. ⁃ Mira - le señalo entusiasmado - aqui tienen nieve. Y con un helado y un paseo en la plaza, la princesa se sintio la mas feliz de todas las princesas. Y el joven Oliver, por un momento se olvido de ir al reino de los siete lagos. ⁃ Es hora de regresar a casa. - le dijo la princesa. ⁃ Te acompaño a tu casa. ⁃ No. Gracias. Pero si gustas, nos podemos ver mañana. Y en eso quedaron. Esa tarde, cuando el joven Oliver estaba solo. Una muchacha se acercó a él y le dijo. ⁃ Tu no eres de por aqui verdad? ⁃ No. Tanto se me nota. ⁃ Es que escuche decir que querias ir al reino de los siete lagos. Yo podria acompañarte, se como llegar ahi. ⁃ Si, que bien. Pero estoy pensando que a lo mejor me quedo un tiempo en este lugar. ⁃ Este lugar - Le dijo la joven - no hay nada para alguien como tu aqui. Sin enbargo yo podria… El joven la interrumpio amablemente. ⁃ Disculpa…. - Esperando oir su nombre ⁃ Me llamo, Es-teher, pero me puedes decir Es. - Le dijo coqueta. ⁃ Disculpa Es. La verdad es que prefiero quedarme aqui en el pueblo por un tiempo El rostro de la joven cambio inmediatamete, se sintio rechazada. ⁃ Sabes que estas tomando una mala desicion. ⁃ Perdon, - dijo Oliver - como sabes que es lo mejor para mi. ⁃ Una mala desicion puede tener consequencias muy graves. Oliver se sintio incomodo. ⁃ Creo que sera mejor que me valla. Te deseo buen viaje Es. Y buena suerte. En el momento en que el joven se marchaba, Es-teher le dijo. ⁃ Disculpa, nunca me dijiste tu nombre. ⁃ Oliver, me llamo, Oliver. ( 9 ) A la mañana siguiente, muy temprano. Oliver estaba de vuelta en la plaza, sabia que en la tarde iba a ver a Sophia, y eso lo entusiasmaba mucho. Un mensajero del Rey, le llamo la atencion. ⁃ Y todos los jovenes han sido convocados por orden de su majestad Otto IV - Se acerco a escuchar y el mensajero continuo. - Hoy mismo se espera que vallan al castillo. El joven que elija el Rey, sera el futuro Rey y le dara la mano de su hija, la Princesa Olivia. Se escucho murmullos entre los jovenes de la plaza, algunos de ellos se apresuraban a ir al castillo. El joven habia quedado de verse con Sophia, por la tarde. No pensaba en la mano de la hija de un Rey, ni pensaba en casarse con ella. Pero penso en ir solo para pasar el tiempo. Nunca antes había visto un palacio de cerca. Y mucho menos un palacio como aquel. Había muchos jóvenes tratando de probar suerte. Cuando llego el turno del joven, un escolta del Rey le dijo. ⁃ Tres cosas pide el Rey. Si las cumples podras casarte con su hija. - continuo el guardia - la primera prueba es que el Rey quiere un hombre fuerte. Deberás cavar un hoyo, por tres días y tres noches sin parar, en donde el Rey te diga. El joven no pensaba en casarse con la hija del Rey. Por algun motivo no dejaba de pensar en Sophia. Pero si terminaba el reto, podia recibir alguna recompenza de parte de el Rey, y asi tendria algo que ofrecerle a Sophia. Acepto el reto. Y fue a cavar en un bosque cercano. Muchos jóvenes estaban haciendo hoyos por todos lados, pero no todos aguantaban los tres días. Algunos de ellos, se desmayaban, otros simplemente pensaban que no valia la pena tanto esfuerzo. El Rey sabía que en ese bosque había un tesoro, por eso quería que todos cavaran ahí. El joven logró cavar por tres días y tres noches, y al final encontró un cofre con oro y piedras preciosas. Los guardias del Rey, llevaron el tesoro y al fuerte joven, quien habia logrado cavar por tres dias y tres noches, a la corte. ⁃ Su alteza - el joven Oliver - Lo presentaron. El Rey le dijo. - Varios jovenes, habian cavado por tres dias y tres noches, eran fuertes, como tu. Pero no tuvieron la suerte de encontrar nada. Tener suerte ayuda mucho. - El Rey continuo hablando - Cuando les dije el siguiente requisito, solo tres lo han aceptado, pero ninguno ha vuelto del reto. Veras, a las afueras del bosque obscuro, hay una criatura gigantesca, que amenaza la poblacion, y nadie ha podido acabar con ella. El joven Oliver, se puso nervioso. En el pueblo habia oido hablar de esa criatura gigante. Todos le tenian miedo. Y toda la gente que se adentraba en el bosque obscuro, no salio vivo. ⁃ Un Rey, debe protejer a su gente - le dijo el monarca - y para ser el futuro Rey y casarte con Mi hija, deberas ir al bosque y matar a esa criatura. Esa noche Oliver pasó la noche sin poder dormir. La mitad de el tiempo pensaba en Sophia, y la otra mitad en lo peligroso de la misión. Nadie había regresado del bosque obscuro. Per que tendría que ser el primero. Pero el Rey le había dicho que tenía suerte, y eso lo alentaba. Tenía que lograr demostrar que en verdad era valiente. Además, no podía regresar a casa sin nada. Había escapado de su casa para mostrarle a su padre, que el podía tener riqueza por si solo. A la mañana siguiente fue a la plaza a ver Sophia. Ya tenían días viéndose. En torno a la mesa de una fonda de la plaza. ⁃ Es muy peligroso - le dijo Sophia. - nadie ha regresado. ⁃ Pero si no lo hago, viviré toda mi vida como un cobarde. ⁃ Vivirás, es lo que importa. Los dos se quedaron callados por un momento. ⁃ Es por ella. Por la princesa.? Quieres casarte con ella. ⁃ Claro que no, ya te he dicho que la única que quiero eres tú. Pero debo hacer algo por mi mismo. Para tener algo que ofrecerte, a ti. Y algo que demostrarle a mi padre. Cuando Sophia, se dio cuenta que no podría evitar detenerlo, le dijo. ⁃ Al menos lleva este pañuelo mío, junto a ti, todo el tiempo. Te servirá para que me recuerdes. ⁃ Gracias. Lo llevaré siempre conmigo. Aunque no necesito un pañuelo para acordarme de ti. Mañana por la mañana partiré al bosque obscuro. Pero te prometo que volveré. Te lo juro, volveré. El camino al bosque era largo y agotador. Aunque el Rey le había dado un caballo y comida para el camino. Le advirtieron, que una vez llegando al bosque, ningún animal se atrevería a entrar en el. Y así fue. Su caballo, simplemente se detuvo, como si una fuerza invisible lo jalara o una pared de cristal le prohibiera seguir andando. Tuvo que continuar a pie. Al entrar al bosque obscuro, sintió un gran escalofrío, y entendió porque le llamaban así. No podía ver nada, solo sombras de árboles retorcidos que crecían sin forma alguna. Hacía calor, pero el sentía frío. Decidió seguir caminando, y poco a poco la obscuridad total se tornó en una niebla espesa. Pero podía ver algo de luz. Era bueno poder ver algo. Pero le asusto más al ver los árboles. Eran inmensos. Cuarenta o ciencuenta veces más altos que el, y con formas tan aterradoras que más de una vez pensó en regresar y salir huyendo. Se escuchaban ruidos, sonidos raros. Pero un zumbido extraño le llamo la atención. Alcanzó a oírlo y al voltear la cabeza, logró esquivar una especie de saliva pegajosa. Que de no haber sido por su suerte y rapidez, lo hubiera partido en dos. Al hacerse a un lado vio a la criatura más horrible que nadie había visto antes. 😊😊😊😊😊😊 Describe el monstruo Oliver mato al Monito La pricesa le dijo a su papa que No Le dijera que ella era su hija. El Rey dijo que una doncella muy bella tambien era lahija. Oliver No Qui so Casarse con la doncella Vio a sophia en el palacio Le dijo al Rey que queria e ella. El Rey le of recibo, todo. Pero oliver prefirio a la pobre sophia. Cuando el Rey vio que queria mas a su hija que a la riqueza Le dijo la verdad y le dio la Mano El Dia de la boda… Llegó Es-teher Era una bruja. Y molesta porque oliver la rechazo Convirtió a todo el pueblo en hilo Y estatuas de hielo. El rey alcanzó a decirle a Oliver Que en la caverna obscura Había un dragón El fuego de su boca podría destruir el hechizo Oliver fue y en el camino se hayo a una hormiga - antena Un águila - pluma Y un leon - uña Un elefante - espada - le salvo a su elefantito Ostra, - perla Cada uno le dio una parte En el camino unos malosones lo encerraron en el calabozo Con la antena de la hormiga salió Tenía que cruzar unos pantanos y montañas Con las plumas del águila cruzo La puerta de la caverna había varios animales Con el poder del leon los destruyó Entro a la caverna, con la espada mato al dragón Agarro un poco de lumbre - lo guardo en la ostra Regreso al pueblo de nieve. Cuando iba a destruir el hechizo La bruja salió Oliver le mostró la perla Era una perla encantada, que destruía a la bruja Y la perla se convirtió en la mamá de Olivia. Con la lumbre desbarato el hechizo Y la mamá volvió a ver a su hija y al rey Y el principe valiente se cazó con la princesa y fueron muy felices.

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